ninguna de las dos recetas que os traigo hoy es mía sino de Natalia. Y es que tanto en su blog como en sus colaboraciones dulces para El Fielato hay toda una serie de bizcochos con unas fotos que te llaman irremediablemente a hacerlos y cuyas recetas son realmente fáciles. Tenía varios pendientes. Tres en concreto, y como la semana pasada me regalaron huevos de campo maravillosos, aproveché para hacer dos. Eso sí, en forma de magdalenas. Todo lo que sean porciones individuales ayuda a mantener mi autocontrol “a raya” ;).
La primera receta son magdalenas hechas con la receta del bizcocho de cardamomo y naranja. El cardamomo es una especia que me encanta y que se utiliza tanto en preparaciones saladas (como el curry) y en dulces, (en los países nórdicos es muy común en galletas y en masas de bollería). Lo encontráis tanto en semillas enteras como molido, si bien es cierto que así, molido, en Badayork hasta hace bien poco era imposible de encontrar. Yo me lo traía desde Dinamarca donde es tan habitual como para nosotros la pimienta negra.
La segunda receta es bastante más potente, se trata de un bizcocho de leche condensada que quita el sentido, y que con los huevos de campo hace que en formato magdalena luzca la masa como si hubiera utilizado colorante. Increíble. Es una masa densa pero muy suave. No apta para haters de la Operación Cakekini.
Y con estas dos ideas os dejo hasta la semana que viene. Recordad que mañana y el viernes estamos en 2 Bread Slices entre rellenos y rebanadas de pan. Disfrutad del domingo.
Gloria.
¡Qué fotos! ¡Qué todo!!! Divino!!! Me voy a desayunar que me ha entrado hambre!!
Gracias mil!
😘😘😘
Buenos días Gloria. Qué desayuno más fácil y rico nos traes para empezar la semana… no sé por cuál de las dos decidirme… así que quiero una de cada, jajaja. Cuando leía la entradilla de tu post de hoy parecía que me estabas describiendo también a mí. Intento ser “sana” en mi día a día pero ante un buen bizcocho o dulce me pierdo…Me encantan las fotos de tus magdalenas, es que se meten por los ojos…
Nunca he visto el cardamomo en polvo. Yo lo tengo en vainas, ¿crees que podré molerlo en casa para hacer la receta?
Gracias y un beso, guapa.
Pilar si es que no tenemos remedio! Cuando la vena golosa es parte de nosotras no podemos obviarla! El cardamomo en polvo es fantástico. Las vainas para prepararlas en bizcochos o panes debes abrirlas, quedarte con las semillas de dentro y cuando tengas unas cuantas destriparlas con un mortero. Es una labor digna de premio Nobel a la paciencia. 😉 Besos grandes y feliz semana.