Los que medio me conocen saben que en casa nos encanta hacer pan, es más no recuerdo la última vez que compré en un supermercado y/o panadería porque si bien fui yo la que empecé a hacer pan a diario hace ya casi dos años, últimamente es K quien le ha cogido el gusto y nos vamos alternando en las “funciones panaderas”. Hacer pan es más sencillo de lo que parece, hay recetas de pan para todos los gustos y las combinaciones son infinitas. Además está el gustazo de saber lo que estás comiendo, porque si nunca os habéis fijado, hasta algo tan básico lo llenan de “porquerías”; la próxima vez que vayáis a un supermercado y compréis pan, fijaos en los ingredientes.
Como os decía hay miles de combinaciones, y la que hoy os traigo, es exquisita para tomar con cualquier tipo de queso, y aquí los dos somos auténticos ratones. Nos chifla, somos súper queseros. La masa en TMX se hace en menos de medio minuto (literal) y el resultado son unos panecillos deliciosos, tiernos y con un sabor espectacular. Ideales para sorprender si tenéis una cena o comida en casa, o simplemente para disfrutar el gustazo de, como nosotros, experimentar con sabores y texturas de algo tan versátil como es el pan.
La receta la tenéis aquí.
Buen fin de semana.
¡¡Me encantan!! Además la idea de poder combinarlos con queso ya ni te cuento… ¡Me chifla el queso! ja ja ja 🙂
oyeeeessss!!!! te han quedado a ti más POTITOS q a la de UNODEDOS, los has hecho redonditos y les has hecho una cruz arriba??? Los has dorado con huevo?? Cuántos huevos si es asi, dos ,tres, de codorniz, de pato, de gallina…???? juasjuasjuas
En serio están más apetitosos los tuyos, los voy a hacer ahora mismito y te los enseño!!!!!
perdón de DIRESSSSTO AL PALADAR!!!
¡Qué ricos! Los hago fijo, porque aquí, también nos ha picado el gusanillo panarra, y aunque a veces sean con la panificadora, hace meses que no compramos pan.
Besos!